Enorme! La alegría, la celebración, el aleluya, también es incontenible, se escapa, desordena las vidas al punto de hacernos gritar. Bellísimo!
Enorme! La alegría, la celebración, el aleluya, también es incontenible, se escapa, desordena las vidas al punto de hacernos gritar. Bellísimo!
ResponderEliminar